Este documento es uno de los últimos escritos por Enchin, en él se aprecia el original trazo de su caligrafía. Consciente de que se le acercaba el final, Enchin redactó listas con cuestiones impotantes relacionadas con la actividad del templo y los ritos, con el fin de pasar esa información a su sucesor. Al final del documento, se añaden instrucciones para quemar el manuscrito tras su lectura ya que contiene información confidencial.